"Ok, ya estoy aquí, dime qué es lo que quieres" - dijo Kurama mientras fruncía el ceño, aunque su expresión cambió cuando notó cómo Tsunade parecía estar un poco incómoda - "¿Qué sucede?"
"No tengo la más mínima idea" - respondió Tsunade mientras sentía cómo algo dentro de ella estaba despertando, a la par de que su sangre vibraba - "Pero siento que estoy pasando por una especie de segundo despertar"
Kurama levantó una ceja, aunque su expresión cambió cuando notó algo en la mirada de Tsunade, algo que reconoció de inmediato - "Oh, mierda"
Exacto, eso era lo único que él pudo decir cuando sintió cómo los ojos color miel de la mujer empezaban a llenarse de algo familiar.
"Ugh..." - Tsunade soltó un gemido irritado mientras intentaba usar todos sus conocimientos médicos para calmar esta extraña sensación en su interior - "¿Esto es la resonancia de sangre del clan Uzumaki?"
"Posiblemente" - respondió Kurama mientras pensaba detenidamente antes de poner su mano en la frente de la mujer, y en el proceso, hacer que ella sintiera cómo su 'estrés' volviera a niveles manejables.
"¿Me inyectaste un poco de tu chakra?" - preguntó Tsunade con sorpresa, después de todo, ella pensó que el chico usaría esta situación para ganar puntos con ella.
"Sí, es la forma más fácil y rápida de solucionar tu problema" - respondió Kurama mientras se encogía de hombros - "Ahora que estás como nueva, dime qué es lo que quieres"
"Me siento un poco menospreciada, se supone que soy la mujer más hermosa de las [Naciones Elementales], y ni siquiera te inmutaste cuando estaba obviamente excitada" - dijo Tsunade con molestia.
"Porque no importa qué tan hermosa seas por fuera, si eres una perra por dentro, no me excitaras en lo más mínimo" - respondió Kurama con desdén, haciendo en el proceso que algo dentro de la mujer se encendiera.
"¿En serio?" - preguntó Tsunade mientras entrecerraba los ojos, solo para abrir la parte superior de su ropa, mostrando un enorme par de montañas, las cuales estaban terminando en dos pequeños puntos rosados.
"¿Pezones invertidos?" - dijo Kurama con sorpresa, aunque luego de pensarlo un poco tenía sentido, después de todo, las tetas de Tsunade eran enormes.
"¿Eso es todo?" - preguntó Tsunade con una mayor irritación, después de todo, ella sentía que estaba en pérdida en esta situación, pero por la expresión del joven de cabello rojo, sus más grandes orgullos no parecían ser nada más que un pequeño aperitivo, lo que causó que su furia aumentara nuevamente.
"¿Qué esperabas, que me arrodillara delante de ti para que me dieras permiso de tocarlas?" - preguntó Kurama mientras le giraba los ojos - "Por favor, no soy un idiota que no ha tenido relaciones sexuales, tampoco alguien desesperado por el dizque afecto de una mujer que obviamente no está interesada"
"Ok, esto ya es personal" - gruñó Tsunade, quien era primera vez en su vida que su belleza no funcionaba en un hombre, así que rápidamente caminó donde el chico y bajó sus pantalones, mostrando su masculinidad que no parecía querer jugar, pero esto no fue impedimento para ella, no, esto era una simple batalla como mujer.
Kurama le dio una mirada en blanco mientras veía cómo Tsunade se detenía, tal vez comprendiendo lo estúpido que estaba actuando, momento en el que Kurama usó para volver a ponerse los pantalones - "Al menos estás consciente"
La compostura desapareció por completo de la mente de Tsunade mientras ella volvía a bajarle los pantalones al chico, solo que esta vez lo hizo con tanta furia que los destrozó gracias a su fuerza sobrehumana.
La expresión de Kurama se distorsionó cuando vio esto, porque era obvio que esta idiota no estaba en sus cabales, pero al mismo tiempo, él sonrió porque no iba a negarle a esta tonta enloquecida lo que ella deseaba, incluso si luego ella se arrepintiera.
Usando un poco de su chakra, Kurama controló su entrepierna lo suficiente para despertar su masculinidad, y en el proceso, sorprendiendo a Tsunade por el tamaño.
La mujer rubia sintió cómo su garganta se apretaba a la par de que su intimidad empezaba a mojarse, tal vez emocionada porque esta la primera vez que veía un pene en tantos años de viaje.
"Usas enormes ubres" - dijo Kurama con tono firme, como el de un líder militar.
Tsunade tragó saliva mientras inconscientemente usaba sus enormes tetas para rodear la carne del chico, sorprendiéndose de que esta mostrara la cabeza de su masculinidad.
"¿Qué estás esperando?" - preguntó Kurama mientras entrecerraba los ojos - "Empieza a mover esas tetas y esa boca"
Tsunade concentró su atención en la masculinidad del chico mientras seguía sus instrucciones, todavía confundida por cómo las cosas habían terminado de esta forma.
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"Estoy un poco preocupada" - dijo Shizune mientras fruncía el ceño y miraba en dirección de la puerta donde estaba su maestra - "Ella ha estado dentro de ese lugar con Kurama-san por más de media hora"
Pakura, quien podía más o menos entender qué era lo que estaba sucediendo en el interior, simplemente guardó silencio, pensando que tal vez con esto, Tsunade reaccionaría con normalidad, después de todo, si había algo que podía calmar a una mujer tensa, era una buena sesión de sexo.
"¿Qué están haciendo aquí?" - preguntó Jiraiya, quien había regresado de su investigación, y esta vez de verdad estaba haciendo su trabajo, y no espiando a mujeres, después de todo, Orochimaru estaba escondido en algún lugar de los [carteles Tanzaku].
Antes de que Shizune pudiera responder, la puerta de la habitación se abrió, mostrando a Tsunade, quien estaba con una expresión molesta en su rostro, mientras que Kurama salía detrás de ella con normalidad.
"¿Qué están haciendo afuera de la habitación?" - preguntó Tsunade con irritación, solo para notar cómo Jiraiya la estaba mirando en silencio - "¿Algo que quieras decir?"
"No" - respondió Jiraiya, quien sentía que su antigua compañera de equipo estaba actuando demasiado a la defensiva.
"Voy a salir un poco" - dijo Kurama mientras ignoraba la mirada irritada de la mujer rubia, así como las miradas de Shizune y Pakura.
"¿Ok?" - Jiraiya asintió en silencio antes de decidir que era mejor no decir nada en esta situación.
"Vámonos, Shizune, luego volveremos para hablar" - dijo Tsunade mientras ignoraba la mirada sonriente de Pakura y llamaba a su estudiante.
"¡Voy!" - exclamó Shizune mientras el dúo salía detrás de Kurama.
"¿Qué fue eso?" - dijo Jiraiya mientras miraba a Pakura, quien simplemente respondió con silencio.
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"¿Qué sucede, Yugito-san?" - preguntó una hermosa mujer de piel color caramelo, y una figura que estaba al nivel de Tsunade Senju.
"Mi Bijuu me dijo que siente una presencia familiar en este lugar" - dijo una bella mujer rubia de figura bien entrenada, con las curvas necesarias en los lugares correctos, aunque esto no se podía notar debido a sus prendas holgadas.
"¿Hay un Jinchuriki en este lugar?" - preguntó una hermosa mujer rubia con peinado bob y ojos azul como el hielo, y una figura comparable con la de su compañera de piel color chocolate.
"Dice que es complicado" - respondió Yugito Nii, la Jinchuriki del Nibi - "Su presencia se está acercando, así que pónganse en guardia, Samui-san, Mabui-san"
Samui, la seductora mujer rubia de grandes pechos simplemente se puso en guardia, mientras que Mabui, la secretaria del Raikage sacó unas agujas senbon con una expresión seria en su rostro, después de todo, la presencia de un Jinchuriki en un lugar tan alejado, significaba que estaban en una misión, o estaban en la fuga.
"Ya está aquí" - dijo Yugito mientras miraba al recién llegado, solo para sorprenderse porque no se esperaba a alguien tan joven.
"Ok, es un poco menor, pero se nota que va a ser apuesto cuando crezca un poco más" - dijo Mabui con sorpresa mientras se lamía los labios.
Samui simplemente guardó silencio mientras analizaba a su oponente - "Konoha"
"El Kyuubi no Kitsune" - dijo Mabui al comprender la complejidad de la situación, aunque rápidamente recordó un pequeño detalle - "Espera, estamos de vacaciones, y tenemos el permiso del Daimio de fuego"
Samui mantuvo su silencio antes de asentir y calmarse.
Kurama, quien las estaba observando, posó sus ojos en los pechos de las mujeres antes de sacudir la cabeza y mirar directamente a sus bellos rostros.
"¿Algo que te haya gustado?" - preguntó Mabui con una sonrisa seductora.
"De hecho, gracias por la comida" - respondió Kurama mientras le daba una mirada igual de sonrojante.
Mabui sintió cómo el calor llegaba a sus mejillas, después de todo, no se esperaba que un chico tan joven le devolviera el ataque - "¡A-Ahem! Hola..."
"Hola, bienvenidas a la [tierra del fuego], mis hermosas compañeras de Kumogakure no Sato" - dijo Kurama al notar la presencia dentro de la chica rubia - "No esperaba encontrarme con Matatabi en este lugar"
Con cada noche que pasaba, Kurama estaba consiguiendo conocimientos a través del chakra del Kyuubi no Kitsune cuya consciencia había sido devorada por el Shinigami.
[¿Quién o qué eres?] - preguntó Yugito con una voz femenina mucho más fiera de lo normal.
"Yo soy yo" - respondió Kurama con honestidad - "Soy Kurama, pero no el Kurama que tú conociste, Matatabi"
[Ya veo...] - murmuró Yugito, o mejor dicho, Matatabi, el Nibi no Bakeneko (Gato monstruo de dos colas) que estaba sellado en su interior - [Me gustaría que los dos pudiéramos hablar en privado]
"No tengo problemas para hacerlo" - respondió Kurama mientras se encogía de hombros.